miércoles, 23 de mayo de 2012

cambiando lo amargo por miel
y la gris ciudad por rosas
te hace bien, tanto como hace mal
te hace odiar, tanto como querer
y más..

martes, 22 de mayo de 2012

Era..

Erase una noche común,
era en una mesa de bar,
era enero en aquel lugar,
y ella me miró de una manera:
agua de mar.
Era de fumar y reír,
era de no saber esperar,
era de salir a buscar,
no era una mirada cualquiera:
era de amar.
Voy caminando por el fondo del mar,
voy caminando por el fondo del mar.
Una gota puede tener
todos los secretos del mar,
todo lo que pueda contar,
todo lo que vino después,
era de imaginar..

domingo, 20 de mayo de 2012

viernes, 18 de mayo de 2012

Para qué queres nadar?..

- Entendido. - Me dijo. Todo resulta más fácil si tenemos bien claro cual es el objetivo que buscamos.

domingo, 13 de mayo de 2012

Ultramaratón..

Llevaba corriendo muchísimo tiempo, así que  era imposible no sufrir físicamente. Pero, en esos momentos, el cansancio había dejado de ser un problema grave. Tal vez, en mi interior, la extenuación ya se había integrado en la -por llamarla de algún  modo- "normalidad". Por su parte, esa asamblea revolucionaria de los músculos, que antes hervía, también parecía haberse resignado a la situación. Ya nadie golpeaba las mesas, nadie lanzaba los vaso. Sencillamente, había aceptado en silencio la extenuación cono una fatalidad, como un inevitable efecto de la revolución. Y yo me había transformado en una especia de autómata que no hacia mas que mover regularmente los brazos adelante y atrás e impulsar las piernas para avanzar paso a paso. Sin pensar nada. Sin creer nada. Sin apenas darme cuenta, incluso la sombra del sufrimiento físico se había desvanecido por completo. O bien, como ocurre con ese mueble horrible que, por alguna razón que sea, no podemos tirar, lo había arrinconado para situarlo fuera de mi vista.
Después de sumirme en una profunda extenuación, y después de aceptarla, parecía que hubiera puesto el piloto automático.
Lo encontraran extraño, pero, al final, prácticamente se había borrado de mi mente no solo el sufrimiento físico, sino incluso cosas como quién era yo o qué hacía en esos instantes. Sin duda era una sensación muy extraña, pero en esos momentos yo ya no era capaz siquiera de percibir hasta qué punto era extraña. El acto de correr se hallaba ya en un ámbito que rozaba casi lo metafísico. Primero estaba el acto de correr y luego, como algo inherente a el, mi existencia. Corro, luego existo. 
Y, en medio de todo aquello, experimente una sensación de serena e inmensa felicidad. Inspiraba y espiraba. No percibía alteración alguna en el sonido de mi respiración. El aire entraba serenamente en mi interior y volvía a salir. Mi silencioso corazón se contraía y se dilataba a un ritmo constante. Mis pulmones iban suministrando oxigeno nuevo a mi cuerpo con diligencia, como dos laboriosos fuelles. Todo funcionaba sin problemas. La gente apostada al borde del camino nos alentaba a grandes voces "Animo que ya falta poco". Esas voces pasaban a través de mi cuerpo como transparente viento. Y yo podía sentir como llegaban hasta el otro lado.
Yo era yo y no lo era. Esa era mi impresión. Una sensación muy apacible y silenciosa.

De qué  hablo cuando hablo de correr. Haruki Murakami.

viernes, 11 de mayo de 2012

Bye, bye, bom..

y si por ahí el miedo
me viene a buscar de nuevo
voy a recordar lo que
cantamos alguna vez..

viernes, 4 de mayo de 2012

Se fue un poco lejos mi amor..

Continuar es no romper el ritmo..

Existía entre nosotros una suerte de entendimiento que no precisaba de palabras.
¿Acaso nuestros sentimientos desaparecen y se pierden así, sin más, de un modo tan frustrante, cuando muere nuestro cuerpo?
Que yo sea yo y no otra persona, es para mí uno de mis más preciados bienes. Las heridas incurables que recibe el corazón son la contraprestación natural que las personas tienen que pagar al mundo por su independencia. 
Esa capacidad para concentrar la cantidad limitada de talento que uno posee en el punto preciso y verterla en él.
Mientras corro, tal vez piense en los ríos. Tal vez piense en las nubes. Pero, en sustancia, no pienso en nada. Simplemente sigo corriendo en medio de ese silencio que añoraba, en medio de ese coqueto y artesanal vacío. Es realmente estupendo. Digan lo que digan.




"De qué hablo cuando hablo de correr" Haruki Murakami

martes, 1 de mayo de 2012

C'mon..

Well, who are you?
I really wanna know
Tell me, who are you?
'Cause I really wanna kno
w..